
Dónde se pescan las almejas
La pesca de geoduck tiene un enorme potencial en la costa oeste de la Península de Baja California y en el Golfo de California, con prominente valor comercial y alta demanda en los países asiáticos.
En unos días entramos en el mes de octubre y abrimos la temporada de almejas, cuya temporada de puesta acostumbra encajar con el periodo de tiempo primavera-verano, con lo que en las costas españolas esta clase se acostumbra localizar en un ambiente cerrado entre marzo y septiembre. Las primordiales especies comercializadas son la almeja fina (Ruditapes decussatus), la babosa (Venerupis pullastra) y la almeja de Manila (Ruditapes philippinarum).
La almeja es un molusco que contribuye enormes provecho a nuestro cuerpo, con lo que es un producto muy apreciado tanto por sus características alimenticias como por sus apps gastronómicas.
Resumen de la pesca de la almeja
Para saberlo todo sobre la pesca de la almeja, dónde hallarla, cuándo pescarla, sus técnicas de pesca y el aparato preciso .
DNR-24 (Harstine Island State Park)
Cosecha: almejas nativas, almejas de Manila, almejas, ostras
El condado de Mason tiene otra buena playa de almejas a 53 minutos de Olympia . DNR-24 corre en todo el Parque Estatal Harstine Island y se integra al Parque Estatal Marino McMicken Island. Es preferible entrar a esta playa en barco, pero hay un camino desde East Yates Road en el Parque Estatal Harstine Island. Se necesita un pase de hallazgo para aparcar en el comienzo del camino.
¿Cuándo comenzaste a comer almejas gallegas?
A inicios de siglo, prácticamente absolutamente nadie comía almejas en España, pero en la década de 1920 empezó la pesca intensiva en Galicia y la demanda de bivalvos se disparó. Ahora en la época de siglo se generalizó el cultivo de distintas especies. La almeja fina fue singularmente apreciada, tanto que en 1935 el gobierno de la Segunda República debió regular su pesca para eludir el agotamiento de las rías. Próximamente este bivalvo ganó poco a poco más aceptación y se transformó en un manjar. Unas gotas de limón alcanzan para probar su frágil carne.
Las almejas gallegas son un ejemplo evidente de marisqueo, excepto la pluralidad rubia, que se recopila desde embarcaciones. Estos bivalvos viven sepultados en la arena del mar o estuario, a unos centímetros de hondura, con lo que se nutren de plancton y otros seres vivos enanos que se filtran por la tierra. Para atrapar las piezas, los mariscadores usan un rastrillo o bolsa particular para sacar el fondo y entrar a él. La ría gallega es un ambiente singularmente propicio para las almejas por las condiciones que proporciona la mezcla de agua de río y de mar.Las mucho más apreciadas, las almejas de Carril, crían en los médanos de esta ciudad pontevedresa, por donde pasa el río Ulla.